CIRCULANDO POR EL CARRIL BICI
- Usa el carril bici. Por tu seguridad, utiliza el carril bici siempre que puedas, aunque te suponga un pequeño rodeo sobre el itinerario más directo.
- Sé respetuoso con los peatones. Si observas peatones parados o caminando a lo largo del carril bici, reduce tu velocidad y avísales de tu presencia con el timbre. En aquellas zonas donde transiten numerosos peatones junto al carril bici y puesto que no se puede prever las trayectorias que llevan, modera y acomoda tu velocidad a la de ellos.
- Circula con prudencia. Controla tu velocidad, el carril bici no es ni un velódromo ni un circuito de competición. No circules a una velocidad mayor que la que garantice la seguridad de todos en las condiciones existentes.
- Respeta las señales de tráfico. No te saltes los semáforos en rojo. Con ello, además de crear situaciones de peligro, contribuyes a que la bicicleta no se considere un medio de transporte serio y respetable, desacreditando al conjunto de los ciclistas.
- Evita los peligros. Si hay coches aparcados junto al carril bici, no circules cerca de ellos para evitar daños en caso de que se abriera una puerta de improviso.
- Respeta los derechos de los peatones. Por no estar señalizados los pasos de los peatones sobre el carril bici, en cualquier punto puedes encontrar algún peatón cruzándolo: reduce tu velocidad y cédele el paso.
- Mantén ambas manos sobre el manillar. Reaccionarás más rápidamente ante cualquier imprevisto y la distancia de frenado será menor.
CIRCULANDO POR LA CALZADA
Si en tus desplazamientos en bicicleta te ves obligado a circular por la calzada con el resto del tráfico, ten en cuenta las siguientes recomendaciones:
- Busca un itinerario seguro. Estudia los itinerarios de manera que circules por calles tranquilas evitando las que tienen gran intensidad de tráfico o las que se circula a alta velocidad.
- Manténte visible ante otros conductores. Evita permanecer en el ángulo muerto de visión de otros conductores.
- Respeta las señales de tráfico. No te saltes los semáforos en rojo, no circules en contradirección, respeta las señales de stop, etc.
- Avisa con señales manuales. Comunica anticipadamente tus movimientos con las manos, los otros conductores conocerán tu trayectoria con lo que aumentará tu seguridad.
- Comprueba que tu trayectoria está libre. Extrema la precaución cuando cruces vías de tranvía, cualquier tipo de rejilla o cuando observes algún agujero o bache en el pavimento. Aprende a mirar atrás por encima del hombro sin perder el equilibrio ni desviarte de tu trayectoria, comprobando de esta manera la trayectoria de otros vehículos.
- Mantén tu trayectoria. No te desplaces hacia el bordillo cuando haya huecos entre los coches aparcados, otros conductores pueden no verte cuando vuelvas a recuperar tu trayectoria inicial. No zigzaguees entre el tráfico.
- Circula por tu derecha. La ley te obliga a ello. Cuando hay varios carriles, es en el carril de la derecha donde se circula a más baja velocidad. Si el carril es estrecho, por la seguridad de todos, circula por el centro del mismo.
- Gira hacia la izquierda con seguridad. Circulando en bicicleta, puedes girar a la izquierda con el resto del tráfico, pero es más seguro hacerlo en dos tiempos, deteniéndote a la derecha de los vehículos que, esperando el verde, van en la misma dirección que tú.
- Circula en línea recta. Circula por la derecha de los vehículos que vayan más rápido que tú, describiendo una trayectoria recta y separada de los vehículos estacionados de manera que no te pueda dañar una puerta que se abra de improviso.
PEDALEA EQUIPADO
- Hazte ver. Procura llevar ropa clara o de colores vivos. De noche utiliza luces delantera y trasera y pon reflectantes en la bicicleta y en tu ropa.
- Mantén tu bucicleta en buenas condiciones de marcha. La mecánica de la bicicleta es sencilla y precisa pocas herramientas especializadas para su mantenimiento. Si no dispones de los conocimientos básicos acude a un taller cuando observes alguna anomalía de acuerdo con las recomendaciones que más adelante se detalla.
- Manténte en forma. Haz ejercicio en tu tiempo de ocio, con ello, desplazarte en bicicleta por la ciudad te costará menos esfuerzo y tu transpiración será menor.
- Pedalea asegurado. Igual que para el resto de los vehículos que circulan por la vía pública, existen pólizas de seguro que cubren daños a terceros, responsabilidad civil, etc.
- Viste de manera apropiada. Ponte el casco. Los guantes aumentan el confort y te protegen las manos del frío. Se recomienda que los zapatos sujeten firmemente los pies y que se vista por capas, para ajustarse a los cambios de temperatura a lo largo del día.
- Ata la bicicleta donde la dejes. Compra el mejor candado que puedas: ningún candado es tan caro como una bicicleta nueva. Los candados en U son más seguros. Si tu bicicleta dispone de dispositivos de apriete rápido en las ruedas, no olvides atar las dos cuando la dejes sin vigilancia.